jueves, 26 de enero de 2012

Guarda que vengo

No me gusta manejar autos. Creo que lo dije no? Te ando perfecto en la bici, me la re ingenio con un ciclomotor pero auto no. No hay feeling con el cuatro ruedas, o no había mejor dicho y dándole una chance a esta relación incipiente.
Aprendí a manejar con mi marido, cuando ya andaba por los veinti y pico, grandecita digamos, en un 205 con el que me llevaba bastante mal. Esto de no gustarme hacía que tampoco prestara atención y mi pobre esposo se gastaba explicando y dando instrucciones que yo nunca escuchaba. Pese a su insistencia de que si ponía interés iba a ser un trámite que me largue a las calles porque salía perfecto sin que se pare el auto (cosa difícil según dicen los que saben), nunca pude dejar de andar por las calles de atrás del Polideportivo porque me daba pánico salir a la costanera y que se me cruce algún otro vehículo. La verdad: a la cuadra de salir yo ya me había olvidado que para pisar el freno hay que pisar el embrague, y pensarlo todo junto se me hacía imposible.
Cuestión que largué el aprendizaje. Años después marido cambió el pequeño auto por una camioneta y ahí dije: nunca más te agarro vehículo.
Con el paso de los años, la mudanza a una zona más alejada del centro de la ciudad y sobre todo, el crecimiento demográfico que hubo en mi familia, mi querido esposo comenzó con una tarea digamos de “taxista”: lleválo a Val allá, buscálo de allá, traéme esto del centro y etcéteras varios.
-Tenés que ponerle onda y sacar el registro. Intentá agarrar la camioneta que tiene dirección más livianita- me repetía incansablemente.
Así pasaron meses, meses, meses. Con el inicio del 2011 me y le prometí que iba a poner mi mejor voluntad, la mejor que encuentre hurgando entre mí, para ver si prestaba un poco más de atención al tema, siempre y cuando, las clases de manejo no fueran de una vez al mes porque obvio ahí, actuaba mi alzheimer y me olvidaba de todo.
Yo pongo voluntad, vos me largás la camioneta mínimamente una vez por semana o como mucho cada 15 días.
Así arranqué con el mastodonte. Le puse onda la verdad, intenté recordar y dejó de asustarme que venga un auto atrás por ejemplo. Pero, siempre hay un pero, mi media naranja se olvidó de la otra parte de su promesa, y las clases se distanciaron tanto en el tiempo que llegó el fin: no intento aprender más hasta no tener un auto. Para qué gastar voluntad en algo que encima que no me gusta  no le puedo dar uso efectivo porque no tengo vehículo????
Hace poco más de 3 meses llegó un día a casa y me dijo –te compré un auto, te lo dan mañana, ahora no te quedan más excusas. Chan!
Así fue que llegó el viernes y me dejaron un Ford Ka usado,  autito chiquito, bien de mina, estacionado en la oficina. –Y porqué acá?, que lo lleve a casa- 
-O lo llevás vos, o duerme acá afuera-
Y así fue como ese día me vine manejando por las calles del centro de la ciudad, después de meses de no agarrar vehículo alguno. Yo que creía que mi cerebro no registraba más que palabras emitidas por mis hijos, me di cuenta que todavía tenía memoria. Recordé como pasar cambios, frené en las esquinas, miré por los espejos retrovisores. Impecable.
Un mes estuve manejando todos los días de casa al trabajo, y viceversa, sin registro porque el miedo a dar el examen de manejo me superaba. Cuando la situación ya se tornó muy ilegal empecé a tramitar los papeles. Oculista, clínico, aranceles. Estudié para el examen teórico y me presenté al práctico con tanto pánico como el día que fui a dar el final de Procesal creo.
Aprobé. Y ahora soy la propietaria de un carnet de conducir, una cédula verde y una azul. También sumé conocimientos varios como que la prioridad de paso siempre la tiene quien viene por la derecha si las calles no son avenida, y que en las rotondas siempre la prioridad la tiene quién va a salir de ellas. De la experiencia en general puedo decir que si aprendí yo, persona que detesta -ba manejar, puede aprender cualquiera.
Eso sí, cordones de la vereda, agárrense. La materia estacionar todavía la estoy cursando.

(Las fotos digitales en los documentos son tannn lindas. Tengo ojos eh! solo que quedaron por ahí abajo)

12 comentarios:

  1. Felicitaciones!!! manejar es muy lindo! cuando se te vayan los nervios y el miedo a los demás, vas a ver que lo vas a disfrutar y todo.
    Eso si, el tema de la prioridad y demás, en la teoría es genial, pero no te confíes! jaja

    Beso!
    Romi

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  2. bien clo felicitaciones!!!!!!
    Ahora podes viajar de lo lindo y los dias de lluvia no te mojas!!!
    ponete el cinturón eh
    besotes
    ayez

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  3. Bien Cloh!!!!!! Felicitaciones!!!!! Es lo mejor manejar y más con niños, no depender de nadie, ni bondi, ni taxi, ni marido.
    Cuando saqué el registro tardé 3 años en salir a manejar, pero cuando me largué no paré más...jajaja, ahora es la pelea con mi marido por quien usa el auto...
    Vamos por las mujeres al volante!!!!!!! Besotes meteoro!!!

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  4. Felicitaciones!!!!!!!!Que bueno es eso de ser la dueña de tus tiempos, ahora que tiemblen las calles de buenos aires!!!!!!!
    besote

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  5. Está buenísima la independencia que te da manejar. Yo también aprendí tarde, y recién saqué el registro a los 30, durante bastante tiempo estacioné última o primera de la cuadra para no tener que maniobrar nada. Ahora, con el caos de autos que hay no me quedó otra que meterlo en cualquier huequito que encuentro. Igual, odio ir al centro o por la Panamericana en auto, termino contracturada. Besito y te felicito!!!

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  6. jajaa felicitaciones!!! y hasta el 2016 cuídense que ahí viene Claudia Elizabeth!!! un beso!!

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  7. Clohhh! Ahh yo ando similar! Me asusta un poco la idea de manejar por bs as.. siempre andaba como vos sin registro por Mar del Plata, hace como 14 años cuando la ciudad tenía la mitad de autos.. en fin, no sé. Creo que hago el curso y rindo antes de irme de vacaciones, o eso espero. Felicitaciones por tu conquista!!! Un día nos vamos juntas a estacionar =) Un beso grande.
    c.

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  8. Cloh!!!!!!!!!!
    felicidades nenaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!
    lo mejor de lo mejor, que mas? somos hijas del rigor, hasta que no nos obligan o sentimos obligadas no arrancamos no?
    ahora a disfrutarlo jajaja
    para mi aun es materia pendiente lalalalalalal
    besote
    vanis

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  9. yo tuve un auto parado 1 año por no saber manejar, iba y venia caminado, con el changuito y la nena, un dìa dije no va mas.....enseñame y creo que aunque no es lo que mas me gusta, la independencia que te da es maravillosa!!

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  10. Felicitaciones!! Ese registro es MUY distinto al mío, qué onda? Lo cambiaron hace poco??

    Venite a Bs As manejando ahora :P

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  11. Qué bueno, felicitaciones! Yo nunca encaré y a esta altura ya no la veo... igual me diste ánimo!;)

    Besos ♥

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  12. Muy buen post, te reee entiendo! Yo saqué la libreta a los 27, hace 3 años ya y ahora si puedo decir que lo disfruto. Igual nunca aprendí a estacionar, prefiero dar 50 vueltas a la manzana antes que dar 20 maniobras para quedar a medio metro del cordón jaja
    Saludos!

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OH! te lee